Somos un colectivo muy numeroso, pero con un gran hándicap, el peso político.
Todos los estudiantes de enseñanzas medias y superiores apenas tenemos un mínimo de peso político-social.
Esta anorexia la podemos apreciar ahora mismo respecto al EEES, vemos que se quiere implantar un sistema educativo antidemocráticamente que el alumnado lo rechaza con una amplia mayoría en asambleas realizadas de manera democrática, también se demuestra en las manifestaciones realizadas por los sindicatos estudiantiles, donde ya han salido a la calle más de medio millón de estudiantes en contra de la LEC y el plan Bolonia.
Todos los estudiantes de enseñanzas medias y superiores apenas tenemos un mínimo de peso político-social.
Esta anorexia la podemos apreciar ahora mismo respecto al EEES, vemos que se quiere implantar un sistema educativo antidemocráticamente que el alumnado lo rechaza con una amplia mayoría en asambleas realizadas de manera democrática, también se demuestra en las manifestaciones realizadas por los sindicatos estudiantiles, donde ya han salido a la calle más de medio millón de estudiantes en contra de la LEC y el plan Bolonia.
Asambleas, manifestaciones, jornadas de huelga, conferencias… y la pregunta es ¿para qué tanta movilización? Para ser tildados de delincuentes por los medios de comunicación y políticos. Estos últimos los cuales ellos son los que imponen a la fuerza modelos educativos antidemocráticos, porque atentan contra los derechos educativos y formativos de la comunidad estudiantil. Estos modelos son impuestos por un interés puramente económico, sin tener en cuenta las verdaderas necesidades de la comunidad educativa.
Planes para la enseñanza como lo es Bolonia pretende ser una involución para la universidad, un retorno a las universidades de mitad del siglo XX, donde los únicos estudiantes se podían costear la carrera debido a la ingente cantidad de dinero que poseían sus padres.
Modelos educativos tales como la famosa EpC en el País Valenciano, donde se quiere dar en inglés, o incluso chino al alumnado de 2º de la ESO, ponen de manifiesto que al gobierno le interesa mucho más la política que la formación de la comunidad educativa. Es un ejemplo claro de cómo en una sociedad en la que cada vez hay más crisis de valores no se busca la solución en la educación, no se busca el consenso entre los diferentes sectores que componen la comunidad educativa, sino que únicamente se van poniendo trabas para que esta formación sea cada vez más inaccesible al alumnado y también al profesorado. Pues a ellos también les falta formación para hacer frente a la docencia de la disciplina.
Este y otros planes, leyes… demuestran que los políticos no se interesan por la comunidad estudiantil, salvo que lxs estudiantes tengan mucho dinero.
Vemos políticos que ignoran una comunidad importante que exige un mínimo de derechos desde hace años. Estos hacen referencia a cubrir las necesidades de la enseñanza pública, pasando por una mayor inversión, una mayor dotación de medios humanos y materiales para conseguir una enseñanza de calidad y facilitar el acceso a los estudios superiores a todo aquel que tenga la capacidad suficiente para acceder a ello. Nunca una política educativa puede negar el acceso a los estudios superiores o universitarios a aquella persona que sea capaz de superarlos.
La educación debe servir para igualar a las personas, no para diferenciarlas.
Artículo de: R.H.M. 4º ESO
IES Hermanos Amorós
IES Hermanos Amorós
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